PARA EL QUE QUIERE SABER MAS: SISTEMA PENAL ACUASTORIO, CRIMINALISTICA EN LA CARPETA DE INVESTIGACION
LUGAR DE LOS HECHOS EN LA CARPETA DE INVESTIGACION
La entomología forense aplicada a la criminalística es de gran utilidad en contextos forenses como apoyo a la investigación, especialmente por el amplio potencial de información que se puede extraer de los insectos encontrados sobre, alrededor y al interior del cadáver al momento de su hallazgo.
Tiene una valiosa aplicación médico forense, principalmente en la estimación del tiempo de muerte dentro de la investigación de homicidio, suicidio, accidentes y delitos sexuales asociados a homicidio, así como en casos que involucran tóxicos y traslado de cuerpos de un lugar a otro, indicando así, si se trata de una escena primaria o secundaria.
Cada uno de los estados de descomposición es atractivo para diferentes grupos de insectos, que son usualmente los primeros organismos en detectar y encontrar un cadáver, frecuentemente a los pocos minutos de la muerte, colonizando en una secuencia predecible.
La recolección cuidadosa de muestras entomológicas en el lugar de los hechos, acompañada de conocimientos biológicos de los artrópodos colectados y de otros hallazgos de escena, investigación y necropsia médico legal permite tanto la reconstrucción de los hechos, como la determinación del tiempo, causa, manera, mecanismo y lugar de la muerte, lo cual es de suma importancia para la resolución de casos criminales.
El funcionario asignado aplica las técnicas de búsqueda descritas en el procedimiento de “Observación y Análisis del Lugar de los Hechos”, realizando un recorrido minucioso por toda el área a explorar. El funcionario asignado ubica y delimita los lugares donde se encuentre fauna cadavérica en sus diferentes estados de desarrollo.
El técnico asignado, toma y registra en el “Acta de Inspección a Lugares” o en la “Inspección Técnica al Cadáver” la temperatura corporal inicial, la temperatura ambiente y la hora de la toma de las temperaturas. Además se tomarán y registrarán los datos reportados en el “Formato de recolección de información de muestras entomológicas en el Lugar de los Hechos”.
Una vez localizada la muestra entomológica, los funcionarios asignados realizan la documentación fotográfica y videográfica y la fijación topográfica de la misma, de acuerdo a los siguientes procedimientos respectivamente:
■“Documentación Fotográfica” dejando como registro el “Álbum Fotográfico” y el formato de “Ficha técnica fotográfica y/o Videográfica”.
■“Documentación Videográfica”.
■“Fijación Topográfica” dejando como registro copia del dibujo en el formato de “Bosquejo Topográfico”.
Así mismo el servidor de policía judicial asignado para la coordinación de la diligencia realiza la descripción narrativa en el “Acta de Inspección a Lugares” o en la “Inspección Técnica al Cadáver” de acuerdo al instructivo de “Actuación del servidor asignado para la coordinación de la Diligencia”.
En la descripción narrativa se incluyen las características físicas del sitio: suelo, humedad, temperatura, clima (si el hallazgo se hizo en una estación seca o lluviosa) y las características de la vegetación. En caso que el lugar posea agua, se registra si se trata de mar, río, a qué profundidad se realizó el hallazgo y si son corrientes de agua rápidas o lentas, según el “Formato de recolección de información de muestras entomológicas en el Lugar de los Hechos”.
Básicamente se pueden colectar tres tipos de muestras entomológicas, estas son: insectos voladores, insectos caminadores y estados inmaduros (huevos, larvas, prepupas, pupas).
Inicialmente, antes de la remoción del cadáver, se colectan los artrópodos que se vean con facilidad y que estén sobrevolando el cuerpo o se encuentren posados sobre él, para lo cual se utiliza una jama o red entomológica. Los insectos caminadores y los estados inmaduros que se encuentran alrededor del cadáver, sobre él y en las cavidades naturales del cuerpo se colectan con pinzas o pinceles humedecidos.
Una vez realizado el levantamiento del cadáver se toman muestras de suelo, tanto debajo del cadáver como de los alrededores.
Si el cadáver se encuentra en un lugar cerrado (edificación, vehículo) es necesario realizar una búsqueda exhaustiva para no dejar de colectar evidencia importante.
Inicialmente se realiza la recolección habitual de insectos alrededor del lugar y enseguida se procede a la recolección de muestras alrededor, sobre y debajo del cadáver.
Si se trata de una habitación cerrada es conveniente buscar en los bordes y esquinas de las paredes, debajo de las alfombras, en los armarios, registros eléctricos y calefacción.
Si es un automóvil que se encuentra cerrado es posible encontrar muestras entomológicas en las tapicerías, debajo de los asientos, en el motor y en el baúl, principalmente.
Toda la información debe registrarse en el “Formato de recolección de información de muestras entomológicas en el Lugar de los Hechos”.
Los ecosistemas acuáticos continentales están habitados por varios grupos de macroinvertebrados, incluyendo insectos, éstos viven sobre el fondo de ríos y lagos, o enterrados en el fango y la arena; adheridos a los troncos, vegetación sumergida y rocas; o nadando activamente dentro del agua o sobre la superficie de la misma.
Es necesario colectar todos los artrópodos visibles cuando se encuentra un cadáver sumergido total o parcialmente, puesto que estas muestras pueden corresponder al ambiente acuático en el que se encuentra o ser de un ambiente terrestre, según el instructivo de “Formato de recolección de información de muestras entomológicas en el Lugar de los Hechos”.
Cuando se encuentren restos inhumados es necesario recolectar muestras de suelo, a diferentes profundidades, según vayan apareciendo insectos en sus distintos estados de desarrollo.
Las muestras entomológicas se pueden colectar con pinceles empapados en alcohol y con pinzas delgadas indicando en la descripción narrativa la profundidad a la cual son recolectadas, de acuerdo a los procedimientos descritos en “Inspección Técnica al Cadáver” y en el “Formato de recolección de información de muestras entomológicas en el Lugar de los Hechos”.
Todas las muestras de insectos adultos se preservan en frascos pequeños con etanol al 70%.
Una parte de los huevos y larvas recolectadas se colocan en un frasco con etanol al 70%. La otra parte de las muestras se mantiene viva y se remite al laboratorio con sustrato alimenticio (hígado de cerdo, hígado de res, carne de cerdo, carne de res) para que puedan ser cultivadas.
Una parte de las pupas colectadas se colocan en un frasco con etanol al 70%. La otra parte se coloca en un recipiente que contiene previamente un papel absorbente húmedo y tapado con tull sostenido por una banda de caucho, para evitar el desecamiento de las muestras y permitir la emergencia de los adultos.
El funcionario asignado realiza las siguientes actividades:
■Cada una de las muestras recolectadas y preservadas, ya sea en etanol al
■70% o en frasco para cultivo deben ser debidamente etiquetadas mediante un rótulo de papel, el cual se escribirá con lápiz de grafito (nunca con esfero, micro punta o marcador porque se puede correr la tinta y dañar los datos).
■El rótulo deberá contener todos los datos descritos en el instructivo “Rotulado de EMP y EF”, posteriormente se introducirá en el frasco con alcohol o se colocará en el exterior del frasco de cultivo y el duplicado irá en la bolsa de embalaje.
■Una vez embaladas las muestras entomológicas el funcionario diligencia el formato de rotulo y cadena de custodia.
Todas las muestras se transportan en una nevera de icopor y deben hacerse
llegar al Laboratorio de Entomología Forense lo más pronto posible para evitar su deterioro y garantizar su estudio.
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